Los filos de los cuchillos sufren por varias razones, una de las causas más habituales es el uso incorrecto de los cuchillos al cortar en superficies inapropiadas, guardar incorrectamente los cuchillos causándoles arañazos y golpes no deseados.

Un cuchillo mal afilado implica un mayor esfuerzo a la hora de trabajar con dicho cuchillo, con un cuchillo bien afilado podrá realizar un buen corte sin realizar apenas ningún esfuerzo.

Para conseguirlo es aconsejable el uso periódico de chairas o aceros para su correcto afilado.

La duración de un cuchillo afilado dependerá de la calidad del cuchillo, la calidad y tipo de acero y el uso al que se somete. Las causas más comunes por las que un cuchillo se deteriora pueden ser:

  • Superficies duras
  • Ejercer mucha presión sobre la hoja
  • Daños por el ácido del limón, tomate y otros alimentos
  • Altas temperaturas
  • Contacto con la hoja de otro cuchillo

Primeros pasos

Algo fundamental a la hora de afilar tus cuchillos es examinar con profundidad la hoja, si ves hendiduras profundas seguramente necesites a un afilador profesional para arreglarlo. Si no notas nada, puedes comenzar con el afilado.

El afilado es muy parecido en todos los casos: primero se desgasta el cuchillo, a continuación se pulen las pequeñas imperfecciones y se perfila. Para el afilado puedes utilizar distintas herramientas como afiladores manuales y eléctricos, chairas, afilado profesional, … Aquí os explicaremos paso a paso cómo afilar un cuchillo con una chaira ya que el proceso de afilado con una afiladora manual o eléctrica es bastante sencillo.

Cómo afilar correctamente un cuchillo

  • Protéje correctamente los dedos.
  • Coloca la hoja del cuchillo y la chaira formando un ángulo agudo de 20º.
  • No muevas el brazo que sujeta la chaira y la otra mano apoyará ligeramente la hoja del cuchillo sobre la chaira, deslizándola sobre ésta manteniendo el ángulo.
  • Pasa repetidamente la hoja del cuchillo sobre la chaira.
  • Afila el otro lado de la hoja repitiendo los mismos lados del movimiento, esta vez por el otro lado de la chaira.
  • Lo ideal sería alternar las pasadas del filo por la chaira, consiguiendo así una perfecta simetría en un lado sin cargar el otro.